
“Si quieres encontrar los secretos del universo, piensa en términos de energía, frecuencia y vibración”.
Nikola Tesla
Déjate guiar e inspirar para limpiar y cargar tus cristales de la mejor forma que sientas. Aquí te comparto mi ritual de bienvenida que es simple y mágico: con mi nuevo cristal lo cojo con la mano izquierda y con la mano derecha lo abrazo, cierro los ojos, respiro y pongo toda mi intención al cristal, para pedirle que me acompañe en todo lo que necesite.
Aquí te dejo diferentes opciones para limpiar tus cristales. Descubre la opción que más te inspire y disfruta de toda su energía. Cristales purificados, activados y felices para vibrar y conectar con toda tu energía y luz.
1. Con agua
El agua es el método más natural y potente para limpiar y purificar. Pasa tu cristal lentamente bajo el grifo o sumérgelo en un recipiente con agua, si pudieras limpiar las piezas en un río es lo mejor. Cuidado que hay piezas como la selenita, calcita, turmalina negra, cianita, malaquita … que por sus propiedades se pueden oxidar o disolver, si dudas mejor escoger otro método.
2. Con humo
El humo mueve y purifica las energías. Con incienso, salvia o palo santo pasa tu cristal por el humo durante un minuto aproximadamente, deja que se impregnen del humo a una distancia prudencial y visualiza como se van limpiando.
3. Con sonido
La música genera ondas vibratorias que armonizan la energía y todo aquello que tocan. Un gong o un bol tibetano, su sonido vibra de manera que los cristales se limpian y se armonizan.
4. Con tierra
Deposítalos bajo tierra, déjalos en contacto con la tierra durante toda la noche. Este método es muy bueno para cristales que acompañan mucho a enraizarnos como la turmalina negra, cuarzo ahumado, … Cuidado con las piezas delicadas.
5. Con sol
La luz del sol ilumina poderosamente y aporta una fuerza extraordinaria. Deja tus piedras al sol para que se limpien, no más de dos horas. Cuidado que hay piezas como la amatista que pierden la intensidad de su color al exponerlas al sol, se vuelven más pálidas de color.
6. Con agua y sal
La sal purifica. Es el método más tradicional aunque la sal es muy abrasiva, yo ya no lo utilizo. Pon tus cristales en un bol con agua y un par de cucharaditas de sal y déjalos toda la noche.
¿CUÁNDO LIMPIAR Y CUÁNDO CARGAR?
En Luna Nueva es el mejor momento para limpiar tus cristales y escoger las diferentes opciones que tienes. En Luna Llena los puedes poner toda la noche a la luz de la luna para que se carguen de nuevo con toda su energía, después de su baño de luz cógelo con tus manos para poner tu intención y respirar de nuevo con él.
Deseo que te sea muy útil este post. Si tienes alguna duda o sugerencia puedes escribirme a hola@mineranima.com, dejar un comentario o seguirnos en Instagram.
Con amor,
Monti.